Cuenta la leyenda que la víspera de la conmemoración de la efeméride de San Andrés se aparecieron unas aspas doradas sobre la mezquita de Almoradí. El ejército, que tenía cercada la ciudad, dirigido por Jaime I interpretó este hecho como una señal del Santo que indicaba que era el momento propicio para la toma de la ciudad.
Para conmemorar la imagen de San Andrés, patrono de Almoradí, se celebran actos religiosos (misa y procesión), actos culturales (concurso fotografía, teatro, actos musicales,…). Estas fiestas se celebran el 30 de noviembre, coincidiendo con la conmemoración del Santo y el Medio Año Festero.